"Pequeña hermana, ¿por qué no quieres que el hermano Bai Yunfei entre a la casa?" "Date prisa y cámbiate de ropa". Fang le entregó un cambio de ropa a Shao Ling y dijo: "¿Por qué traes a un extraño a casa? Padre y los demás no están aquí, ¿qué haremos si pasa algo malo?" Ling suspiró. "Ya te dije que el hermano Bai Yunfei no es una mala persona. No deberías sospechar tanto de él. ¡El hermano Bai Yunfei es increíble! ¡Puede luchar contra los tigres estando completamente desarmado! Es posible que sea incluso más fuerte que el hermano Zhu Zi". Xiao Fang estaba por decir algo, pero de pronto oyó ruido detrás de la casa y sus ojos se iluminaron. "¡Padre y los otros volvieron! Vamos a recibirlos". Bai Yunfei vio como un grupo de hombres bajaban de la montaña en dirección a la aldea. Portaban arcos y flechas, además de conejos y faisanes enzarzados en picas de madera. Ling y Fang salieron de la casa. La chica ya no demostraba el rostro tenso y severo de hace unos minutos. "Hermano Bai Yunfei, mi padre y los otros han regresado. Iré a recibirlos, por favor espera aquí", dijo Shao Ling. Después de un rato de charla, los hombres trataron a Bai Yunfei con admiración y solemnidad. Tal vez se debiera al relato que les contó Shao Ling. Incluso Xiao Fang se comportaba un poco más amigable. Sin embargo, el joven llamado Zhu Zi fue quien se mostró algo hostil al escuchar que Bai Yunfei se quedaría en la misma casa de Xiao Fang. La familia de Shao Ling se conformaba por cinco personas. Contando a Ling y Fang, la abuela y el padre, solo faltaba la madre, quien salió de la aldea para buscar hierbas medicinales y no volvió sino hasta más tarde. En la noche comenzó a llover. Una cama extra fue añadida en la habitación de Shao Ling para que la usara Bai Yunfei. Cuando el muchacho se durmió, Yunfei se levantó silenciosamente. "No puedo dejarme engañar por las apariencias otra vez. Nunca se sabe quién puede ser el próximo enemigo; quien puede ser el siguiente escorpión. Y peor aún, un escorpión con alas de libélula", concluyó Bai Yunfei. "Cultivar dos elementos puede que no sea la mejor opción en estos momentos. Necesito primero enfocarme en fortalecer mi energía elemental de Fuego y manejar una gran cantidad de esta de forma correcta; antes de probar con un segundo elemento". "Gracias a mis objetos fortalecidos, la batalla contra el gran escorpión no me pareció tan complicada. Aunque esto también puede deberse a que esa bestia poseía doble elemento pero no se especializaba en ninguno, por lo que sus fuerzas estaban divididas…" "¿Será que estoy confiando demasiado en mis objetos fortalecidos? ¿Sin ellos… seré muy vulnerable?" Bai Yunfei miró el brazalete protector en su brazo con signos de preocupación. Al cabo de unos segundos, sacudió la cabeza y murmuró: "¿Qué estoy pensando? Es una tontería tener tales objetos y no utilizarlos. La Técnica de Fortalecimiento de Objetos es mi habilidad única, parte de mi propio poder. No disponer de esta es como negarme a caminar". "Pero que curioso… Entre más fuerte me hago, más enemigos poderosos van apareciendo. Da la impresión que mis herramientas empiezan a ser menos útiles a este paso…" Bai Yunfei extrajo la armadura Seda Dorada que se quitó antes de llegar la aldea y guardó en su anillo interdimensional. La superficie se notaba rasgada, con abolladuras y otras marcas producto de sus combates anteriores. "Los Atributos Adicionales de mis accesorios también empiezan a ser insuficientes. Por otra parte, los valores fijos en los objetos fortalecidos parecen ser relativos a mi fuerza". El grado Alto era el más alto entre los accesorios fortalecidos de Yunfei, y estos aportaban alrededor de 60 puntos en Atributos Adicionales. Esta cantidad ya no era algo muy significativo con el poder actual del joven, pero igual no negaba que todas las mejoras adicionales que le otorgaban sus accesorios sumaban un buen valor. La armadura Seda Dorada había acompañado a Bai Yunfei durante medio año. Recordó aquella vez cuando la obtuvo en la Fortaleza Bosque Negro, rememorando su guerra contra los bandidos y cultivadores de Alma, recordando a su viejo amigo Li Chengfeng, y muchas otras cosas más. La armadura consistía en su único objeto defensivo, omitiendo el brazalete protector que se limitaba solo al brazo derecho. Bai Yunfei pensó en fortalecer su armadura. No obstante, existía el riesgo que el procedimiento saliera mal y el objeto se destruyera. "Mejor haré mi rutina de fortalecimiento y luego me tomaré unos días para descansar en esta aldea antes de partir a la provincia de Pingchuan". La llamada rutina de fortalecimiento consistía en mejorar una decena de objetos aleatoriamente. Si tenía suerte y no se destruían, entonces continuaba fortaleciendo otros más. De lo contrario, simplemente dejaba de hacerlo. Cuarenta minutos después… ‘Fortalecimiento Exitoso’. ‘Grado de Objeto: Alto’. ‘Nivel de Fortalecimiento: +10’. ‘Atributo Adicional: Fuerza +58’. ‘Efecto Adicional de +10: se añaden 112 puntos de Fuerza adicionales’. ‘Condición de Fortalecimiento: 29 Puntos de Alma’. Bai Yunfei miró el anillo color verde esmeralda en su mano y sonrió con satisfacción. "Bien. No creí que conseguiría fortalecer tres objetos a +10. Los efectos no son la gran cosa, pero es mejor que nada". ¿Hmm? ¿Ya me quedé sin cosas para mejorar?" Bai Yunfei se dio cuenta que no tenía más herramientas guardadas en su anillo interdimensional. "Uh… Esto sí que fue rápido". Sacudiendo la cabeza, decidió irse a dormir. Pero entonces se dio cuenta que todavía le quedaba un objeto más: su sombrero de paja fortalecido a +8. Aprovechando la suerte que tenía esa noche, Bai Yunfei comenzó a mejorar el objeto. "Fortalecer". ‘Fortalecimiento Exitoso’. "Fortalecer…" ‘Fortalecimiento Exitoso’.